Los fluctuantes niveles hormonales durante la perimenopausia y la menopausia pueden generar estrés emocional. Para gestionar este estrés, es esencial encontrar métodos efectivos. Personalmente, encuentro gran relajación en el contacto con la naturaleza.
¿Alguna vez has caminado descalza sobre el césped o abrazado un árbol? Es una experiencia incomparable que brinda armonía, relajación y sanación interior. Quitarse los zapatos, desconectar de la tecnología y sentir el césped bajo los pies durante al menos 10 minutos al día proporciona una renovada fuerza para retomar las tareas diarias. Esta sencilla práctica, conocida como «grounding» o «earthing», está al alcance de todas.
¿Qué es el Grounding?
El grounding, o puesta a tierra, es una terapia que realinea tu energía eléctrica con la de la tierra, basada en la ciencia que explica cómo las cargas eléctricas terrestres pueden tener efectos positivos en el cuerpo. Facilita vivir el momento presente y regular el estado de ánimo en pocos minutos al día.
Aunque el grounding es un tema poco investigado y carece de suficientes estudios que respalden sus beneficios, las investigaciones existentes coinciden en que ofrece múltiples beneficios para la ansiedad, depresión, enfermedades cardiovasculares, alivio de la inflamación, dolor crónico e insomnio. (Consulta mi artículo sobre la perimenopausia y el insomnio aquí). Personalmente, lo practico casi a diario por su aporte positivo a mi día.
Tipos de Grounding
Incorpora el grounding a tu rutina de bienestar. Así como te esfuerzas por comer saludablemente y hacer ejercicio a diario, incluye unos minutos de grounding:
- Camina descalza en el césped o la arena de la playa.
- Acuéstate en el césped, conectándote con la tierra y absorbiendo vitamina D del sol.
- Nada en el mar y flota para relajarte con los minerales del agua de mar.
- Abraza un árbol expresando gratitud por la naturaleza.
Trae el Grounding al Interior
Si no tienes acceso a la naturaleza, llena tu entorno con plantas de interior. Estudios indican que estas plantas pueden tener un impacto positivo en la salud, mejorando la calidad del aire. Además de ser estéticas, ayudan a convertir el dióxido de carbono en oxígeno.
Abraza la Sabiduría de la Naturaleza para el Bienestar y la Resiliencia
En resumen, integra el grounding en tu rutina de cuidado personal, junto con una alimentación saludable y ejercicio. Rodearte de verde, ya sea dentro o fuera de tu hogar, es clave. La naturaleza, sabia y proveedora, nos ofrece todo lo necesario para alimentarnos y sanarnos de maneras a veces inexplicables pero efectivas. Acepta el poder del grounding para mejorar tu bienestar general, fortaleciendo tu resiliencia frente a los desafíos asociados al envejecimiento y la menopausia.
Ana Victoria Villar.
Estilo de Vida. Meditación. Menopausia. Perimenopausia. Bienestar Mental.
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