«¿Te pasa a menudo que estás buscando algo y te olvidaste qué era? ¿Te levantas con la mente nublada y cansancio mental? ¿Olvidas lo que ibas a decir con frecuencia o te cuesta concentrarte en alguna tarea específica?»
Bueno, podemos echarle toda la culpa a la edad, pero la verdad es que esto va de la mano de nuestros hábitos y cuidados que le damos a nuestro cerebro. Si bien hay un factor de envejecimiento que podría estar actuando ahí, nosotras somos capaces de manejar nuestra capacidad de concentración y mejorar nuestra memoria. ¿Cómo? Pues aquí te dejo algunos consejos.
Sueño:
Primero, es básico hablar de la calidad de sueño. Dormir al menos 7 horas diarias permite que nuestro cerebro descanse y se limpie. Es importante cuidar y respetar este hábito ya que influye en varias funciones cerebrales y en general en todo nuestro cuerpo. Un cerebro cansado no puede concentrarse y mantener una buena memoria.
Hacer ejercicio
Hacer ejercicio o dar un paseo por la naturaleza ayuda a oxigenar y producir varias hormonas, entre ellas la serotonina, la hormona de la felicidad. Ésta actúa en nuestro cerebro como neurotransmisor. Permite que se produzcan conexiones neuronales, lo que es esencial para la concentración y la memoria.
Dieta
Aunque parezca que no debería influir, hay alimentos que pueden promover o no la concentración. Así que trata de alimentarte de la manera más limpia posible, consumiendo alimentos orgánicos y lo menos procesados; en especial, evitar neurotoxinas como el aspartame y glutamato monosódico que afectan directamente las funciones cerebrales.
Alrededor de un 60% de nuestro cerebro está compuesto de grasa, así que consumir grasas saludables como el pescado, suplementos de omega-3, nueces y frutos secos, benefician altamente tu cerebro. También alimentos antiinflamatorios y antioxidantes como los frutos rojos y los vegetales de hojas verde oscuro ayudarán a desintoxicar y promover una mayor oxigenación.
Beber
Trata de consumir más té verde que café. Si bien el café contiene más cafeína que el té verde, este último contiene L-teanina, un aminoácido que aumenta la atención, el enfoque mental y ayuda a incrementar el estado de alerta. Otra ventaja es que el té verde libera energía de manera constante por mayor tiempo sostenido, evitando los picos y caídas energéticas que produce el café, lo que ocasiona esa sensación de ansiedad por tomarte otro y volver a elevar el pico energético.
Orden mental
El siguiente paso es el orden mental. Nuestra vida puede estar cargada de trabajo y tareas pendientes, sin embargo, si mantienes hábitos que te ayuden a conseguir un orden y tranquilidad mental será muy saludable para tu cerebro.
Así que, ordenar tus ideas, usar una agenda o un diario donde descargues por escrito lo que te inunda la mente es un gran ejercicio. También es importante usar técnicas de meditación, respiración y aplicar a nuestro día a día los principios de vivir en atención plena y consciente de nuestro presente. Para esto, debemos evitar la “multitarea” y andar en automático sin prestar real atención a lo que hacemos.
Sí, somos mujeres, por naturaleza nuestra mente es compleja y tenemos la habilidad de hacer y resolver varias cosas a la vez. Pero calma, para lograr más concentración, mejores resultados y ser más eficientes es mejor enfocarte y poner toda tu atención en una sola tarea a la vez. Verás que tu concentración es mayor y el resultado positivo y más eficiente.
Reducir el estrés
Hablemos ahora del famoso “estrés”. Esos días agotadores, las malas noticias, las preocupaciones, los problemas, el dormir mal, la falta de ejercicio, la mala alimentación, y puedo seguir infinitamente; causan que nuestro sistema límbico en el cerebro se ponga hiperactivo ocasionando un sin número de pensamientos negativos automáticos y sentimientos de depresión, ansiedad y negatividad.
Pues, te digo, que esto es lo que mayormente nos agota la mente y nos quita la concentración. La buena noticia es que es aquí donde actúan directamente los aceites esenciales y ejercen su magia!
- Inhalar aceite esencial de Romero es espectacular para promover la claridad mental y mejorar la retención de la memoria.
- Los aceites esenciales de cítricos como el limón, la mandarina y la toronja también son maravillosos para calmar la mente, bajar los niveles de estrés mental, estimulan el estado de ánimo positivo y bajan la tensión, lo cual desencadena en mayor concentración y focalización en nuestras tareas diarias. Unas cuantas gotas de alguno de estos aceites en un difusor en tu lugar de trabajo harán maravillas con tu desempeño. Te sentirás más enfocada y productiva. No te aconsejo aplicarlos de manera tópica ya que los cítricos pueden irritar la piel si los aplicas sin diluir. Otra razón es que son fotosensibles y ante la exposición al sol pueden manchar la piel.
- Por otro lado, uno de los aceites que nunca falta en mi cartera, es el aceite esencial de Menta Pipperita. Este, si bien no es específicamente para calmar la mente, lo que hace es despertarla. Esos momentos que estás con la sensación de mente nublada y necesitas un “cachetadón” de energía mental, te aplicas una gotita en la palma de la mano e inhalas el aceite, siempre con mucho cuidado de que no entre en contacto con tus ojos y mucosas de la nariz. También puedes frotar un par de gotitas de este aceite en la parte baja del cráneo y la nuca. Esto te ayudará a liberar tensiones y sentirte más despejada.
Detecta cuál o cuáles de estos aspectos debes mejorar y trabaja en ello. Recuerda, tú ejerces el control y orden en tu mente. Tu paz mental es la base de tu salud, no permitas que nada te la arrebate.
Mary Carmen Zaidan.
Mujeres maduras. Salud corporal. Estilo de vida. Bienestar mental.
Foto de @pablo-merchan-montes.